Hace unos meses, tuve la oportunidad de viajar a bordo del crucero más grande del mundo, el Wonder of the Seas, gracias a Royal Caribbean. Aunque te conté mis impresiones en YouTube, donde también hace poco te hablé del próximo más grande del mundo, hoy quiero contarte más detalles sobre el barco y la experiencia.
El barco en números
Sin duda alguna, el Wonder es impresionante desde el primer momento en que lo ves. Lo primero que llama la atención son sus dimensiones. Estamos hablando de más de 360m de largo, 64m de ancho y 18 cubiertas. Además, tiene una capacidad máxima de casi 7.000 pasajeros y 2.300 miembros de tripulación.
A simple vista, puede parecer que lo único que llama la atención del barco es el tamaño, y es verdad que es lo que llena casi todos los titulares pero, para mi, la verdadera magia está dentro.
Ocho vecindarios sobre el mar
Si has viajado en algún otro barco de la clase Oasis de Royal Caribbean, te habrás familiarizado con su forma de dividir el barco. A diferencia de otros, no tiene un atrio central y salones distribuidos a lo largo de los puentes sino que hay varias zonas principales que reúnen todos los restaurantes, bares y opciones de ocio y entretenimiento. Es lo que Royal denomina vecindarios.
Quizás la Royal Promenade es la zona que podríamos considerar más céntrica. Es un paseo cubierto de varias alturas con tiendas y bares como el impresionante Tide Bar (una plataforma que sube y baja con el bar dentro), el Bionic Bar (donde un brazo robótico te prepara la bebida) o un Starbucks. También cuenta con la pizzeria Sorrento's, incluida en el precio, y el Café Promenade, una cafetería 24h con dulces, café y chocolates. También es aquí donde está el Spotlight Karaoke, para pasar una noche entretenida cantando solo o en compañía.
Otro de los vecindarios que destacaría es el Central Park. Diría que fue mi lugar favorito a bordo. Este paseo está al aire libre y es un parque con más de 10.000 plantas naturales rodeado de restaurantes de especialidad, como Chops Grille, especialistas en carnes, o el exclusivo 150 Central Park, uno de los mejores que hay a bordo. También hay zonas para sentarte a relajarte, el Park Café, y todos los balcones que dan a esta zona.
Por último, quiero hablarte en detalle del Boardwalk. Este es otro paseo al aire libre, situado en la popa del barco, y está inspirado en una feria clásica en un muelle marítimo. Nada más entrar, nos encontramos con su icónico carrousel y opciones para comer más informales como los perritos calientes, la tienda de dulces, el bar de deportes y una hamburguesería clásica americana. Aquí también encontramos balcones interiores y en la parte posterior se encuentra la joya del barco: el impresionante AquaTheater. Se trata de un anfiteatro acuático donde se realizan espectáculos increíbles, de los cuales te hablaré más adelante.
El resto del barco incluye también zonas muy interesantes como el Entertainment Place, una zona con el teatro, una pista de hielo y el casino; el Vitality Spa & Fitness, un enorme complejo de deporte y bienestar; las cubiertas exteriores, con piscinas, parques acuáticos y actividades como el simulador de surf o el mini-golf; el solárium; el vecindario exclusivo de las suites; y muchos más restaurantes y las zonas infantiles y de adolescentes.
Si quieres conocer en detalle todas las zonas del barco, te he preparado una visita guiada:
El camarote
Toca hablar del alojamiento. En mi caso, tuve un balcón con vistas al mar, probablemente la opción más popular. El espacio me gustó mucho, siendo muy luminoso y amplio. La cama es grande y cómoda y el balcón está bien para poder salir cada vez que te apetezca. Esto es interesante ya que el Wonder tiene pocos espacios exteriores a media altura; la mayoría están arriba. El baño es algo pequeño como en la mayoría de cruceros pero suficiente y práctico.
Durante la visita al Wonder, tuve la oportunidad de conocer una de las suites más exclusivas a bordo: la Royal Suite. Es simplemente espectacular, con dos alturas, vistas panorámicas, doble habitación y dos baños privados, un balcón con hidromasaje e incluso un piano de cola. Tienes la visita en el vídeo de YouTube que te comentaba.
El resto de opciones a bordo incluyen los camarotes interiores y exteriores, además de balcones interiores (que dan al Central Park o al Boardwalk). También hay muchas clases de suites, desde algunas que son similares a los balcones pero con más espacio hasta otras que son tipo loft o incluso la Family Suite incluso con toboganes dentro de la misma habitación.
Opciones gastronómicas
Hay que empezar comentando que las opciones de comida y bebida a bordo son casi infinitas. De hecho, creo que es imposible conocerlas todas en una semana de crucero. Voy a empezar hablándote del restaurante principal. Se trata de un espacio enorme de tres puentes. Diría que jamás he estado en un restaurante tan grande, ni sobre el mar ni en tierra. Sirven comida a la carta y existen turnos fijos o la posibilidad de comer en horario flexible. La comida me pareció muy correcta, con propuestas clásicas de ensaladas, pastas, carnes, pescados y varios postres.
Otra opción es el buffet. Me llamó mucho la atención la variedad que hay tanto para desayunar como para las comidas. Hay rincones de comida internacional, opciones para todo tipo de dietas y tiene unas maravillosas vistas al Boardwalk y al mar.
Además del restaurante y el buffet, Royal incluye mucha más comida como las galletas y tartas de las cafeterías principales, helados de máquina, fruta, perritos calientes y pizza. Esto es algo fantástico ya que te da más libertad y flexibilidad para comer a cualquier hora del día y sin gastar más.
Algo en lo que destaca mucho también el barco es en la cantidad de restaurantes de especialidad que ofrece. Algunas de las opciones son Giovanni's, con comida italiana; Wonderland, un espacio muy creativo inspirado en el País de las Maravillas; o el Hooked, un restaurante con mucho marisco y producto marino.
Una de las novedades es el Mason Jar. Se trata de un restaurante sureño estadounidense con comida típica de la zona como el pollo frito con gofres y miel. Me pareció muy interesante ya que es una propuesta muy diferente a la comida europea y son productos bastante sencillos pero con combinaciones muy llamativas y bien ejecutadas.
Entretenimiento
Llegamos al punto más fuerte de Royal Caribbean y el que más me sorprendió. Empezamos por el AquaTheater. Lo que pasa en este espacio te deja literalmente sin palabras. Aquí se realiza un show acuático con luces, música y muchas acrobacias con un elenco enorme y una producción muy trabajada. Diría que es uno de los mejores espectáculos que he visto jamás tanto a bordo como en tierra. Es un sitio directamente único y el mejor espectáculo que hay en los mares sin duda alguna.
El Wonder también dispone de un teatro clásico donde se realizan producciones del nivel de Broadway. En este barco no hay un musical como en otros pero hay shows musicales que disfrutarás mucho también.
Otro espacio muy sorprendente es el Studio B. Aquí asistimos a un espectáculo de patinaje sobre hielo realmente precioso. Combina a la perfección actuación, coreografías, y un juego de luces, proyecciones sobre la pista y efectos especiales. De 10.
Además de los espectáculos principales, hay muchas actividades en otros lugares del barco, como el festival de vikingos, juegos de animación o shows de comedia. No te va a dar tiempo a aburrirte.
Experiencia e impresiones
En general, la experiencia fue maravillosa. Es verdad que fue mi primer y único contacto con un crucero de Royal Caribbean y que fueron solo 2 noches, pero pude hacerme una idea de lo mucho que ofrecen.
Sin duda lo que más me gustaron fueron los shows y el barco en sí, que sorprende lo mires por donde lo mires. Algo que está genial también es la app desde la que se gestiona todo el viaje, incluso antes de que empiece. Imprescindible si tienes un crucero con Royal y desde la cual puedes reservar actividades, o ver los planos de cubiertas.
Algo que debes tener en cuenta es que el idioma de la compañía es el inglés, así como la mayoría de su público es estadounidense. Al menos durante mi viaje ninguna de las comunicaciones se realizaron en español, aunque no creo que sea problema encontrar miembros de la tripulación que puedan ayudarte si tienes alguna duda. Además la app lo hace todo más fácil si te cuesta comunicarte en el idioma y necesitas hacer algunas gestiones.
En definitiva, es un crucero que veo muy orientado a familias y a aquellos que quieran vivir unos días a bordo sin aburrimiento. El barco se siente como un destino propiamente ya que hay infinidad de cosas para hacer y lo mejor es que hay algo para cada persona.
¿Quieres saber cómo van a llevar este concepto de mega-barco al siguiente nivel? En enero de 2024 empieza a navegar por el Caribe la próxima clase de barcos de Royal, que es una evolución del concepto del Wonder y sus naves gemelas. Te dejo el vídeo del próximo Icon of the Seas.
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